Posted on 22 Oct 2014

Victorina Gallegos hizo una demostración de cómo las piezas de artesanía adquieren el color negro, utilizando productos naturales como el guano de caballo y desechos de trigo.

Victorina Gallegos Muñoz

Victorina Gallegos Muñoz

Utilizando productos naturales como el guano de caballo, de buey y desechos de trigo, la ceramista de Quinchamalí Victorina Gallegos Muñoz, realizó una clase práctica de quema de greda en los hornos de cerámica de la Facultad de Arte de la Universidad de Playa Ancha.

La actividad, consistió en una demostración de la técnica ancestral utilizada por la alfarera de la Región del Biobío para el proceso de teñido de las piezas de greda, y como estas pasan del tradicional color rojo al negro que todos conocemos.

Ruth Santander, académica del Taller de Cerámica de la Facultad de Arte, manifestó que esta actividad es una técnica muy tradicional y antigua que se hace en Quinchamalí, y que hay que conservarla y enseñárselas a las nuevas generaciones. “En esta oportunidad, la alfarera trabajó la quema y teñido de la cerámica, y como se produce el color negro sobre las piezas”, dijo.

“Ver este trabajo en directo en la Facultad de Arte es una maravilla, principalmente porque coincide con nuestros planes de estudio que incluye la artesanía de Pomaire, Quinchamalí y la cerámica Diaguita, conocimientos que se deben traspasar a los estudiantes para que conozcan estas ancestrales técnicas”, acotó la académica UPLA.

En tanto, la artesana a cargo de la clase práctica, Victorina Gallegos Muñoz, explicó que “lo que se hizo fue una quema rápida, para que los jóvenes vean como las piezas pasan de rojo a negro. Este trabajo, por lo general, requiere de alrededor de 16 procesos y para que una pieza quede terminada debe ser trabajada a lo menos cinco días”.

“Esta técnica la aprendí de mis abuelos y padres cuando tenía 12 años. Llevó más de 50 años dedicada a la greda y por eso es importante enseñar este oficio, porque ya no tenemos descendencia de esta artesanía. Actualmente en Quinchamalí somos 30 personas que la trabajamos, pero solo 12 estamos activas y enseñamos el trabajo de cerámica negra”, finalizó Gallegos Muñoz.